Hace ya casi veinte años que vivo aquí y en general todo es como un paraíso. Pero no.
Es casi como la imagen de una delicada y hermosa flor con una soberbia mancha provocada por el excremento de un pájaro. Así de contradictorio y natural.
Odio acaloradamente los cortes de calles y sobretodo cuando veo un cana enfundado en fluo verde que a las 10 de la mañana corta una calle porque a mitad de cuadra hay un camión descargando mercaderías en un negocio. O porque a la municipalidad se le ocurre que esa es la mejor hora de cambiar la lamparita de un foco de alumbrado.
Cualquier idiota puede parar un camión en doble fila y comenzar a cargar o descargar cosas del camión a la hora que se le antoje que, rápidamente, surge un proto-vigilante de fluo que desvía el transito en la esquina. A cualquier hora.
Odio sin consideración alguna a los autos que no respetan la luz roja de los semáforos. Y en especial a remiseros , camioneros o colectiveros que hagan eso porque para ejercer su oficio tienen un permiso de conducir “profesional”.
Odio cuando se viene la temporada veraniega porque es cuando hacen obras en las calles y cuando salen a la ruta los fluo para “hacer control policial” y reducen la doble vía a una sola. Alguna vez pregunté porque esperan que se llene de turistas para complicar el transito, y alguien me contestó: “lo hacen en verano para que los turistas vean que acá se trabaja”. No sería mas inteligente que las obras ya estén listas cuando vienen y que el tránsito fluya.
Odio, ya sin esperanzas, a aquellos candidatos políticos a concejales, diputados o intendentes que para llegar a su sede partidaria, van en sus autos de contramano varias cuadras por la ruta 20.
Si hacen eso ahora que son candidatos, que nos espera para cuando sean elegidos y tengan el poder.
Juana Koslay es una hermosa comarca. ¿Que tan fea será suficiente para los que habitamos en ella?
Estoy de acuerdo, esto pasa en S.Luis, pero tb.en otras ciudades creo que también ocurre.No tenemos educación vial, por eso estamos primeros en ranking de accidentes automovilísticos mortales, y acá se nota mucho.
ResponderEliminar